20100322

Hyper!

Cueeeeek!!! No sé qué me pasa... creo que tengo alguna idea de lo que me pasa, pero en ningun caso... ay, qué iba a decir??? Noooo... Bueno, ando aceleradita... ando como nerviosa... No me he movido de mi cama ni despegado del computador desde hace como media hora, pero siento que tirito todo el tiempo. Ansiedad? Sí! Eso es, ando ansiosa-ansiosa-ansiosa... creo que no más espressos dobles para mí cuando tengo el estómago vacío. Quiero saber cuánto dura el efecto de la Rita(lina)... Olvidé que Av Andrés Bello sólo tiene un sentido en hora peak (sí, me metí contra el tránsito de las 20 h, pero por diez o quince metro sno más :s) No me siento concentradísima al volante (como siempre), no veo a todos los peatones ni a todos los perros (sí, me toca frenar fuerte), me he puesto a conversar mirando a mi interlocutor-copiloto (yo no hacía eso!! cuando me doy cuenta me da sustooo), y hasta miro el paisaje como si fuera arquitecto extranjero que viene a Santiago por primera vez. Iwal eso último se ha vuelo menos frecuente... ojalá sea el efecto (placebo o no) de doña Rita.

Ehh... sí, así como iba contando, toi tomando esas cosas que le dan a los niños no tan niños que traen DAA. En realidad me cuesta establecer prioridades entre las cosas que tengo ganas de hacer. Efectos secundarios de haber tenido depre: la búsqueda de bienestar y sensación de felicidad se vuelve en contra. Hay cosas que hay que hacer, hay cosas que quiero hacer, hay cosas y cosas... todo se me mezcla en la cabeza, como si fuera un enjambre de abejas en campo de flores abiertas, y como si todas las flores fueran iguales. Normalmente no me cuesta mantener la atención (obviamente no al mismo nivel) en dos cosas, pero ahora último... ehhh... (...) Ah, sí... cuesta harto. O sea, en verdad no es que cueste, sino que molesta. Molesta tener muchas cosas dando vueltas y que ninguna pese más que otra, porque yo sí quiero elegir una por sobre las demás, o darle más valor a una que a otra... pero no puedo. Estoy entre lo que quiero hacer y lo que debería estar haciendo... y no sé qué cosa me importa más que la otra. La última vez que tuve a doña Rita en la lista de fármacos de Layzcita, era que se me olvidaban las cosas. Olvidaba lo que había hecho, y olvidaba lo que no había hecho (creyendo que sí había hecho). Horrible. Creer con toda y sincera confianza en algo, y que ese algo no exista... ¡y peor! ...que lo haya inventado yo, y sin querer!!! ¿Cómo se sentirán los cleptómanos al darse cuenta de que roban? ¿Y la gente que tiene alzheimer? Ay, pobre gente... yo sí me imagino cómo se sienten.

Volviendo al asunto de las abejas y las flores... ocurre que hay plantas con flores bieeeen rascas, pero que necesitan ser polinizadas sí o sí (hay casos en que el espíritu santo, o ciertas "hormonas" vegetales me transforman la flor en fruto; para el resto de los casos, necesitamos polen funcional en el momento y lugar correcto). Así pues, me siento como abeja en plantación de kiwis (durante floración, obvio), que no sabe si ir tras el abundante polen de kiwi que viene en flor fea y sin néctar, o ir tras el polen de la maleza circundante (será menos polen por flor, será más largo el recorrido, pero son flores bellas y con néctar... ñami! ...total, el polen no es pa mí).

Y siguiendo con temas relacionados... o algo relacionados... se me ocurrió podar un par de arbolitos (y algunos arbustitos) en casa de Sergio. Y resucitó la tendinitis. Viene de repente, y se va de repente. De hecho, no sé qué hago escribiendo aquí. Es que la ansiedad me decía que apretara botoncitos... en realidad la ansiedad no me decía mucho, pero apretar botoncitos sin tener que pensar mucho ha ayudado bastante: Ya no tiritan mis manos. Creo que ya me puedo ir a dormir.


Fui a una grabación de Los Improvisadores (ViaX). Estuvo genial.